Si hay un postre al que no puedo resistirme es al tiramisú, este clásico de la gastronomía italiana es sin duda, mi postre favorito, y a pesar de ello, aún no había publicado mi receta de tiramisú casero. Siempre que tengo oportunidad lo pruebo en restaurantes o incluso las versiones de supermercados, ya que las hay bastante buenas, pero aún así sigo prefiriendo esta que hoy os traigo.
El tiramisú fue creado a inicios de 1970 en el restaurante La Beccherie, de Treviso, por el pastelero Roberto Linguanotto, quien añadió mascarpone, los bizcochos savoiardi y café, a un dulce muy popular, el sbatudin, una mezcla de yemas y azúcar que se daba como vigorizante a los niños, enfermos y personas mayores (Enciclopedia de la Gastronomía Italiana – Ed. Blume).
En este caso he aprovechado restos de un bizcocho para hacer el tiramisú, para mí es la mejor opción, ya que suelen absorber muy bien el baño de café y queda una textura muy suave que no se deshace. Además así convertimos este delicioso postre en una receta de aprovechamiento.
Es una receta muy ligera a pesar del mascarpone, ya que al no añadirle ningún elemento graso más, la mezcla con las claras y las yemas, lo aligera y le da el justo necesario para que no pierda ni un ápice de sabor pero restándole pesadez, así tendrás un postre cremoso y ligero, el tiramisú perfecto.
Tiramisú casero
Receta de tiramisú casero
- 500 g de queso mascarpone
- 200 g de azúcar glas
- 1 cdta de vainilla bourbon en pasta
- 6 yemas de huevo
- 4 claras de huevo
- cacao en polvo
- bizcocho
- 200 ml de café
- 15 ml licor de café
- 15 ml licor de avellanas
- 20 ml de agua
- 2 cdtas de cacao
Batir las claras de huevo hasta que estén firmes y reservar.
Batir las yemas con el azúcar y la vainilla hasta obtener una crema espumosa y blanquecina. Añadir poco a poco el mascarpone y seguir batiendo hasta que esté totalmente integrado.
Mezclar las claras con la crema de mascarpone con las varillas hasta obtener una crema ligera y homogénea, es importante que este paso lo hagáis con mucho cuidado, para no perder el aire de las claras montadas. Reservamos.
Mezclamos el café con el licor de café, el licor de avellanas, el agua y el cacao.
Cortamos el bizcocho muy fino, ponemos una capa en el fondo de la bandeja. Empapamos el bizcocho con la mezcla de café. Cubrimos con la mitad de la crema. Repetimos los mismo pasos una segunda vez.
Cubrimos la bandeja con film y metemos el tiramisú en la nevera unas horas, mejor si lo haces la noche anterior.
Antes de servir, espolvoréalo con cacao en polvo.
Algunos apuntes
*Prefiero el sabor de la avellana al de la almendra, pero si en vuestro caso preferís este último, sólo tendréis que sustituir el licor de avellanas por uno de almendras, y si queréis ser fieles al original… que sea de almendras amargas!
*El uso del mascarpone es fundamental para el éxito de esta receta, su sabor y suavidad es inigualable a cualquier otro queso del mercado.
*Podéis prepararlo con 24 horas de antelación ante cualquier celebración o evento.
*Los platos de Greengate y las cucharas de Sabre podréis encontrarlas en My Pretty Table
Comentarios
Tags: cacao cafe italia postre queso
5 Comments
Me encanta el tiramisú y también es mi postre favorito pero me gustaría que dieras la receta con las yemas que no sean crudas.
Mil gracias
Yo también pico muchas veces de comprar la versión del tiramisú de los supers, cuando me quiero dar el caprichito, pero como tú dices, no se puede comparar al casero. Me encanta como te ha quedado, tiene una pinta exquisita. 1 besazo!
Gracias!! Hay algunos comprados que no están mal, al menos te quita el deseo!
El tiramisu es un postre que siempre hace quedar bien a la cocinera. El tuyo tiene una pinta deliciosa.
Besos
Mil gracias María Dolores! Un besazo fuerte!