Las «Nanaimo bars» son unos dulces originarios de Canadá, su origen se remonta a los años 50 en los que Mabel Jenkins, una ama de casa del sur de la ciudad de Nanaimo, envió esta receta a una revista que se publicaba anualmente para recaudar fondos, la «Cowichan Women´s Institute Cookbook», la receta rápidamente se hizo popular y se empezó a elaborar en todos los puntos del país, siendo conocida como las barritas de Nanaimo por su ciudad de origen.

Como en todas las recetas de posguerra es muy calórica y además es una muestra de la recuperación económica de los hogares: avena, mantequilla, frutos secos y chocolate; ingredientes esenciales pero que se acababan de recuperar tras una época de escasez. Es una receta muy sencilla y que además no necesitas hornear, así que es ideal para estos días.

Es un pastel tipo «bar» eso es que se hornea de una sola pieza y una vez frío, se va cortando en cuadraditos o barritos, tal y como hacemos con el brownie por ejemplo. En este caso se alterna una base de galleta súper rica con avena, cacao, coco y frutos secos; con una crema de mantequilla a la que normalmente se le pone la mezcla en polvo de las natillas, yo prefiero poner una buena vainilla, pero podéis probar con las natillas si os apetece; y por último con una fina capa de chocolate. Tiene todos los elementos para ser un snack ideal en cualquier mesa, y además admite muchísimas variaciones: diferentes frutos secos, cremas de diferentes sabores o probar con otro tipo de chocolate.

¿Qué ingredientes necesitas para hacer las Nanaimo bars?

Mantequilla, puedes utilizar tu marca favorita, siempre sin sal.
Azúcar, vas a necesitar azúcar blanquilla común para la base de esta receta.
Huevo, huevo de tamaño M, si puedes, compra de gallinas en libertad, nutricionalmente es igual pero se favorece la cría del animal de un modo más sostenible.
Cacao en polvo, cacao puro y sin endulzar es el que vas a necesitar, a mi me encanta de la marca Van Houten, en este caso he usado el Rich Deep Brown (aquí)
Galletas molidas, puedes utilizar las que quieras, a mi me gusta hacer este tipo de bases con galletas que sepan más a cereal, tipo las digestive, pero admite cualquier variación.
Coco rallado, necesitarás un coco rallado fino, siempre verifica que es fresco y no tiene un sabor raro, es fundamental renovar este tipo de ingredientes constantemente.
Nueces pecanas, es mi fruto seco favorito para este tipo de recetas pero puedes usar el que más te guste, nueces, avellanas, una mezcla…¡lo que quieras!
Pasta de vainilla, mi favorita es la vainila de la marca Sosa (vainilla Sosa aquí), viene en formato de 250 gramos y sirve para cualquier preparación.
Leche entera, los lácteos son una forma ideal de suavizar la crema de mantequilla, usa siempre entera.
Azúcar glas tipo icing (aquí), es un azúcar glas más fino que el que habitualmente encuentras en los supermercados, así no notarás ningún tipo de granillo en la boca.
Chocolate de cobertura 811 de Callebaut (aquí) , para estas preparaciones me encanta la cobertura de Callebaut, viene en formato de pequeñas gotas por lo que es muy fácil de derretir y además tiene un sabor delicioso.
Aceite de coco (ver aquí), me encanta usar este tipo de aceite para el chocolate, sobre todo si en la receta no desentona el sabor a coco que deja. Puedes utilizar manteca de cacao que es más neutra si prefieres.
Sal en escamas, es la compañera ideal para el chocolate, intensifica su sabor y da potencia a cada bocado.

¿Qué utensilios necesitas para las Nanaimo Bars?

Un molde cuadrado de 20 x 20 centímetros, a mi para estas recetas me encanta el de fondo removible de la marca Masterclass (ver molde aquí), además de tener una calidad increíble es muy fácil de usar y permite un desmoldado perfecto sin esfuerzo.
Spray antiadherente (ver aquí), es fundamental utilizarlo para un resultado perfecto sin exceso de grasa.
Papel de horno (ver aquí), un papel perfecto para utilizar en el molde y que el desmoldado sea perfecto, además nos ayuda a mantener el molde en perfecto estado.

Nanaimo bars

Receta de nanaimo bars

*Para la base

115 g de mantequilla

50 g de azúcar

1 huevo M

3 cucharadas de cacao en polvo

235 g de galletas molidas

85 g de coco rallado

50 g de nueces pecanas

1 cucharadita de pasta de vainilla

Utiliza un molde cuadrado de 20 x 20 cm, mi favorito para este tipo de recetas es este, se puede levantar el fondo y me resulta muy fácil desmoldar y cortar. Prepara el molde con spray antiadherente y papel de horno.

Pica las nueces o el fruto seco que hayas elegido, mézclalo en un bol grande con el coco rallado y las galletas molidas. Reserva.

Pon en un bol al baño maría la mantequilla, el azúcar, el cacao y la vainilla. Llévalo a fuego medio y cuece la preparación durante unos 5-10 minutos sin dejar de remover hasta que la mezcla espese. Pasado este tiempo, vierte la crema a la mezcla de coco y galletas. Remueve con una espátula hasta que esté homogéneo.

Coloca en el molde, aplastando bien la mezcla, distribuyéndola uniformemente.

Lleva a la nevera unos 15 minutos, mientras prepara la crema de mantequilla.

*Para la crema de mantequilla

120 g de mantequilla

60 ml de leche

2 cucharaditas de pasta de vainilla

450 g de azúcar glas tipo icing

Bate con unas varillas la mantequilla con el azúcar hasta que esté esponjosa, tenga volumen y haya blanqueado. Añade la vainilla y sigue batiendo. Por último añade la leche para ajustar la cremosidad. Bate hasta que tengas una crema homogénea.

Saca el molde de la nevera y coloca con una espátula una capa de crema de mantequilla sobre la base de galletas. Vuelve a refrigerar.

*Para el glaseado de chocolate

120 g de chocolate tipo cobertura

2 cucharadas de aceite de coco

sal en escamas

Derrite el chocolate al baño maría, cuando esté semiderretido, añade el aceite de coco y bate enérgicamente hasta que esté totalmente derretido e integrado.

Saca el molde de la nevera y vierte el chocolate con mucho cuidado sobre la crema de mantequilla, mueve el molde suavemente para que el chocolate se distribuya por toda la superficie.

Deja que enfríe en la nevera totalmente, esto puede llevarte unos 30 minutos. Pasado este tiempo, saca del molde, corta en cuadraditos de unos 4 x 4 centímetros y añade un poco de sal en escamas sobre el chocolate.