Ha comenzado la época de postres fríos, en este momentos, las tartas de queso y las mousses empiezan a copar los postres, aunque sin duda, el postre veraniego por excelencia es el helado y si además hablamos de helados caseros, esto ya toma otra dimensión.

Los helados suelen tener tres bases: yogur, son los más sencillos de hacer y los más ligeros; los helados de nata y queso, son helados muy cremosos; y los helados de yemas de huevo, en los que la base es una crema pastelera ligera; no son complicados de hacer en general, lo único que requieren es un poco de paciencia, ya que hay que esperar a que la crema enfríe antes de mantecarla, y para mejores resultados una heladera.

Desde hace un par de años tengo la heladera de la Kitchenaid (podéis comprarla aquí), la verdad que no ocupa mucho espacio en el congelador y es muy sencilla de usar, además de permitirte hacer un helado muy cremoso en pocos minutos, es impresionante ver como se van montando la crema helada. Este verano va a ser mi gran aliada en la cocina, ya que cuando pruebas los helados caseros, 100% a tu gusto, no hay marcha atrás!

El tiramisú es uno de los platos por excelencia de la gastronomía italiana, su ingrediente principal es el queso mascarpone, por lo que es sencillo su paso a helado, con una crema de base de queso y una combinación de licores que te harán recordar este delicioso postre. Y sin más os dejo con esta deliciosa receta de helado.

Helado de tiramisú

Receta de helado de tiramisú (Adaptada de The Perfect Scoop)

• 450 g de queso mascarpone
• 250 ml de nata para montar
• 130 g de azúcar
• una pizca de sal
• 60 ml de licor de café
• 45 ml de licor de avellanas

*Sirope de café

• 100 g de azúcar
• 80 ml de sirope de maiz
• 125 ml de café
• 50 g de cacao
• 1/2 cdta de vainilla bourbon en pasta

Comenzamos preparando la crema, para ello ponemos un cazo con la nata, añadimos el azúcar y removemos hasta que el azúcar se disuelva. Reservamos.

Batimos con unas varillas el queso, la nata, la sal, el licor de café y el licor de avellanas, paramos cuando tengamos una crema homogénea y lisa.

Vertemos en un bol y tapamos con film. Reservamos en la nevera para que enfríe. Así nos será más sencillo mantecar el helado.

Mientras se enfríe podemos preparar el sirope de café.

Vertemos todos los ingredientes del sirope y removemos con unas varillas hasta obtener un crema homogénea.

Por fin llega el momento de hacer el helado, si lo haces con la heladera de Kitchenaid simplemente tendrás que encajar el bol, encajar el transmisor en el cabezal y colocar la espátula de modo que encaje todo correctamente. Una vez que tenemos todo colocado, vamos vertiendo la masa poco a poco, lo tendremos a velocidad 2-3 unos 20 minutos. Una vez que esté listo lo podemos tomar directamente o verterlo en un contenedor de helado.

Si lo hacéis con una heladera sin comprensor como estas, la forma de hacer el helado es la misma. Si no tenéis heladera podréis hacerlo congelando la crema y triturándola 2 o 3 veces hasta que se haga cremoso. Aunque realmente si os gustan los helados, cuando probéis los caseros, tendréis que haceros con una heladera (esto engancha!!).

El sirope de café se lo podéis añadir de dos modos, en la heladera, mientras que el helado se va haciendo o bien a la hora de echarlo en el contenedor, para ello, sólo tendréis que alternar las capas de helado con sirope.