El 17 de marzo es San Patricio, día que los irlandeses celebran con una gran fiesta, de hecho, durante 5 días hay desfiles en Dublín y el verde se convierte en el color estrella, inunda la ropa, sombreros e incluso en otros lugares, donde la población irlandesa es significativa como en Chicago, el río se tiñe de este color para conmemorar al patrón de Irlanda.
Otro de los símbolos de Irlanda es la cerveza Guinness, una cerveza negra tipo stout, que se toma fría y cuyo sabor recuerda al regaliz, esta cerveza viene elaborándose desde 1759 en Dublín y se ha convertido en parte de la cultura del país. Así que no hay mejor ingrediente para conmemorar el Sant Patrick’s Day que esta cerveza.
Hace años que Nigella Lawson publicó en su libro Feast esta receta de tarta Guinness, pero la primera vez que la vi fue en Food and Cook, entonces fue un impacto total, una tarta de miga negra… pero una vez que la pruebas te conquista, tiene un sabor muy intenso a chocolate, un ligero toque a regaliz y una humedad alucinante, además la suavidad de la crema de queso contrasta a perfección con la intensidad del bizcocho.
Receta de Tarta Guinness
Tarta Guinness
- 250 ml de cerveza stout negra Guinness
- 250 g de mantequilla
- 75 g de cacao en polvo
- 2 huevos
- 400 g de azúcar
- 150 ml de nata
- 1 cdta. de vainilla bourbon en pasta
- 250 g de harina
- 1 pizca de sal
- 2,5 cdtas de bicarbonato
- 300 g de queso crema
- 300 g de nata vegetal para montar (si no utilizaremos 300 ml de nata y 150 de azúcar glass)
Precalentamos el horno a 180ºC. Preparamos un molde de 20 cm de aluminio con spray antiadherente y reservamos.
Poner en un cazo la cerveza con la mantequilla, poner a fuego lento hasta que se derrita la mantequilla.
Mientras mezclamos el cacao, el azúcar, la harina, la sal y el bicarbonato.
Batimos los huevos, con la nata y la vainilla. Añadimos a la cerveza con la mantequilla y seguimos batiendo.
Vamos incorporando poco a poco la mezcla de ingredientes secos. Mezclamos con unas varillas hasta que tengamos una mezcla homogénea.
Vertemos la masa en el molde y metemos en el horno. Horneamos unos 60 minutos.
Sacamos del horno, este bizcocho se suele hundir en el centro. Dejamos que repose 10 minutos, pasado este tiempo, desmoldamos y dejamos que enfríe sobre rejilla.
Mientras enfría preparamos la crema.
Empezamos a batir la nata con unas varillas eléctricas, cuando esté casi montada, añadimos el queso, si lo hacemos con nata vegetal no tendremos que añadir azúcar. Lo más importante en cualquiera de los casos es que la nata esté muy fría.
Cuando la tarta esté fría, cubrimos con la crema.
Dejamos reposar en la nevera un par de hora y servimos.
Algunos apuntes
*Esta tarta está aún más rica si la hacéis con un día de antelación, los sabores se asientan y se llena de aromas.
*Tiene un sabor tan especial que también encantará a los que no son muy amigos de las tartas de chocolate, el uso de la cerveza negra le da una suavidad y un toque ante el que no se podrán resistir.
*Se puede hacer en un molde de 23 cm, quedará un poco más baja pero también tiene una bonita presentación, en este caso se hundirá menos por el centro.
*Prefiero hornear en aluminio, esta vez he usado este molde de 20 cm, es el que más uso ya que el tamaño es perfecto para hacer una tarta para 8-10 personas. Sólo tienes que tener la precaución de usar spray antiadherente para que la corteza quede perfecta.
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