Después de unos días sin poder dedicarle unas horas al blog, por fin, estoy de vuelta, aunque aún me quedan bodas, cursos y fines de semana en los que la cocina estará en un segundo plano. Hoy os traigo una tarta que tenía muchas ganas de probar, la auténtica cherry pie americana, el momento es perfecto, las cerezas están en su justo punto y qué mejor que aprovecharlo.

Esta tarta es muy sencilla, simplemente dos elementos: la pasta brisa y las cerezas, así que será fundamental la elección de unas cerezas de calidad y de realizar la pasta brisa casera, hay mucha diferencia entre esta y la que encontramos ya elaborada.

La pasta brisa es una mezcla de harina, mantequilla, una pizca de sal, un poco de azúcar y un poco de agua fría que hace que liguen todos los ingredientes. Esta masa es fantástica para todo tipo de tartas de frutas, simplemente un poco de crema y algo de fruta fresca es un relleno fantástico.

Al contrario que muchas otras tartas de este tipo, no necesita el horneado a ciegas, lo que hace que su preparación sea aún más sencilla.

Es fundamental deshuesar las cerezas adecuadamente para usarlas como relleno, actualmente existen muchos tipos de deshuesadores, aunque el más común es la pinza, que también podréis usar para aceitunas, es una operación muy sencilla y rápida que además te permitirá darle las cerezas a los niños con total tranquilidad o para hacer una deliciosa mermelada.

Una vez horneada la tarta, es mucho mejor esperar 24 horas, una vez pasado este tiempo, se acompaña con un poco de helado de nata o vainilla y a disfrutarla.

Receta de Tarta de cerezas (Cherry pie)

-Para molde de 20 cm-

• 375 g de harina de trigo
• 1 pizca de sal
• 1 cucharita de azúcar
• 225 g de mantequilla en cubitos fría
• 125 ml de agua fría
• 1 cucharita de canela
• 1 pizca de sal
• 150 g de azúcar
• 2 cucharadas de mantequilla
• 2 cucharadas soperas de maizena
• 400 g de cerezas
• 1 huevo batido

Lo primero que tenemos que hacer es la pasta brisa, para ello, ponemos la mantequilla, harina, el azúcar y la sal en el bol de la Kitchen Aid, con la pala K mezclaremos en velocidad 3, cuando la mezcla tenga apariencia de migas, sin dejar de mezclar, iremos añadiendo poco a poco el agua, así hasta que tengamos una masa homogénea. La volcaremos sobre rollo film y la guardaremos en la nevera mientras que hacemos el relleno.

Deshuesamos las cerezas con ayuda de un deshuesador (puedes comprarlo aquí). Mezclamos las cerezas con el resto de ingredientes y dejamos reservado en un bol.

Precalentamos el horno a 200º.

Estiramos la masa y cortamos dos discos de aproximadamente 24 cm, cubrimos la base de un molde especial para tartas como este con uno de los discos, rellenamos con las cerezas y cubrimos con el otro disco de masa.

Hacemos unos cortes en el centro y pintamos con huevo. Espolvoreamos un poco de sanding sugar blanca o de azúcar blanquilla.

Metemos la tarta en el horno a 200º y hornearemos durante 1 hora aproximadamente o hasta que esté dorada.

Sacamos la tarta y la dejaremos reposar 24 horas.

 

 

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