El arroz con leche es uno de mis postres favoritos, me encanta en todas su versiones en pudding, con fruta, al horno y como no, en una de sus versiones más tradicionales, el asturiano. Por lo que he leído la principal característica de este postre es usar ingredientes de muchísima calidad, siempre se ha utilizado leche fresca, a mi personalmente no me gusta y prefiero usar la pasteurizada, pero si sois partidarios de la fresca, aprovechad para usarla en este postre. También es importante utilizar un arroz de grano redondo y de buena calidad, al final es lo que va a dar sabor y cuerpo a nuestro postre.
Y si hay otra cosa que caracteriza a este arroz con leche además de removerlo con cuchara de madera, es la rotura del grano con agua al principio de la preparación, así se consigue sacar más almidón y que el arroz sea aún más cremoso. He visto que muchas personas no lo hacen e igualmente les queda cremoso, yo que habitualmente lo he preparado sin esta «rotura» del almidón previa, os puedo contar que me ha quedado una cremosidad impresionante y mucho más suave y suelto que otras veces. Por lo que seguro que lo volveré a hacer aunque no haga la versión con azúcar quemada asturiana.
Otra de las diferencias, esta la más evidente, es que se presenta con azúcar quemado, esa capita de caramelo es deliciosa y le va increiblemente bien a este postre, así que no perdáis la oportunidad de probarlo.
Arroz con leche asturiano
Receta de arroz con leche asturiano (adaptada de Javi Recetas)
- 125 g de arroz redondo
- 1 litro de leche
- 85 g de azúcar (más 50 g para quemar)
- 25 g de mantequilla
- 1 pizca de sal
- 125 ml de agua
- piel de un limón lavado
- 1 ramita de canela
- 1 cdta. de vainilla en pasta (aquí)
- anís (opcional)
Lavar el arroz con agua.
Es muy importante que la leche no esté fría, si es así, templar en un cazo.
Poner en una cacerola el agua, llevarla a ebullición y añadir el arroz, remover para que no se pegue al fondo y esperar a que el agua se evapore.
Cuando esté evaporado, añadir la mitad de la leche con la mantequilla, sal, la piel del limón y la ramita de canela. Remover cada pocos minutos para evitar que se pegue y para conseguir la cremosidad deseada. Añadir el resto de la leche y seguir removiendo cada pocos minutos. Este proceso se hace a fuego lento y puede llevar hora y media o dos horas.
Cuando el arroz ya esté hecho y la leche se haya reducido, añadir el azúcar, remover y dejar cocer durante un minuto. Si queréis en este momento podéis añadir un chorrito de anís. Retirar del fuego, sacar la ramita de canela y la piel del limón y servir en boles o tazas.
Salen entre 4 y 6 raciones.
Una vez frío, espolvorear azúcar sobre la superficie y quemar con un soplete como este.
Algunos apuntes
- Este arroz queda muy cremoso, si os gusta más suelto, podéis añadir un poco más de leche a la cocción.
- Tened en cuenta que al reposar espesa, así que al retirar del fuego debe quedar un poco suelto para que al asentar quede en el punto justo.
- Yo he reducido la cantidad de azúcar porque no me gustan los postres muy dulces, pero Javi Recetas recomienda entre 100 y 125 g.
- Lo podéis tomar templado o frío, yo prefiero tomarlo frío y acompañado de frutos rojos, incluso lo tomo como merienda.
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