Hace muchos días que no me paso por aquí para publicar alguna receta, no es porque no hornee, si me seguís por instagram, ya veis que lo de horneary probar recetas sí que lo hago a menudo.
Tengo algunas recetas pendientes de publicar, espero retomar el ritmo y ponerme al día con todas esas que merecen la pena compartir. Pienso en unas galletas suecas, un par de tartas de zanahoria…realmente no sé si llegaré antes de que las temperaturas nos quiten las ganas!
Si gusta la repostería más allá de nuestras fronteras seguro que habéis visto en miles de sitios recetas hechas con ruibarbo, este tallo tan llamativo por su color magenta y el sabor ácido tan característico. La verdad, es que es difícil de encontrar por nuestros mercados, más que nada porque el tiempo de recolección es muy corto, unas dos semanas, y esto hace que sea difícil su distribución, si lo encontráis, no dudéis, coged algunos tallos e incluso podéis congelarlos para usar cuando mejor os convenga.
El ruibarbo es delicioso combinado con fresas, le aportan dulzor y jugosidad, además le potencian el color, con lo que no sólo te queda una tarta o mermelada deliciosa sino que además aún será más bonita.
Por todo esto, os traigo un coffee cake, perfecto para hacer con esa combinación: ruibarbo y fresas: es un bizcocho jugoso, dulce en su punto justogracias a la fruta y crujiente gracias a la capa de migas; una combinación perfecta para acompañar con un buen té helado. ¿Te animas?
Coffee cake de fresas y ruibarbo (adaptada de Martha Stewart)
Receta de Coffee cake de fresas y ruibarbo
- 140 g de mantequilla muy fría + 30 g de mantequilla
- zumo de 2 limones
- 40 g de fécula de maíz (maizena)
- 350 g de azúcar
- 100 g de azúcar moreno
- 300 g de fresas
- 600 g de ruibarbo
- 350 g de harina de trigo
- 50 g de almendra laminada
- 150 g de harina de espelta
- 1 cdta de levadura
- 1/2 cdta de bicarbonato
- 1/2 cdta de sal
- 2 huevos
- 375 ml de yogur griego
- azúcar glass y leche para glasear
Preparar un molde de rosco de 26-27 cm o dos de papel como estos, yo preparé uno de ellos para regalar, así hornear directamente en este molde es perfecto si esta es tu intención.
Poner en una cacerola las fresas, el ruibarbo troceado, 200 g de azúcar, el zumo de limón y la fécula, remover y poner a fuego lento durante unos 30 minutos, hasta que la fruta esté cocinada y el jugo haya espesado. Retirar para que enfríe y reservar.
Derretir 30 g de mantequilla y reservar.
Mezclar el azúcar moreno con la harina de espelta, añadir la mantequilla derretida y mezclar con las manos como si hicieras migas, añadir las almendras laminas, mezclar y reservar.
Precalentar el hornoa 180ºC.
Para la masa de bizcocho, mezclaremos por un lado el resto de ingredientes sólidos como harina, azúcar, levadura, bicarbonato y sal con la mantequilla muy fría hasta obtener una masa como de migas. Y por otro lado el yogur y los huevos. Unimos ambas mezclas y batimos hasta que nos quede homogéneo y una masa bastante espesa.
Vertemos en el molde la mitad de la masa de bizcocho, ponemos sobre este la mitad de la confitura, repetimos con la otra mitad de ambas preparaciones. Por último cubrimos con la mezcla de las migas de almendra, harina de espelta y azúcar moreno.
Horneamos durante unos 40 minutos si lo haces en moldes separados o una hora aproximadamente si lo haces en un único molde.
Una vez frío, preparar un glaseado de azúcar glass y leche, sólo tienes que mezclar ambos ingredientes hasta que te quede una textura espesa, echar sobre el bizcocho.
Algunos apuntes
*Los moldes de papel son perfectos cuando quieres regalar un pastel o simplemente lo tienes que llevar a algún sitio, yo siempre tengo alguno en casa. Puedes ver los que he usado para esta receta aquí.
*Si prefieres hacerlo en un molde de aluminio, el molde Angel Cake (aquí) es perfecto y si lo tuyo son los tradicionales, el savarin (aquí) como este también te dará buen resultado.
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Tags: fresa ruibarbo
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